jueves, 4 de marzo de 2021

*Como un enjambre de meteoros*












Me dispongo a anochecer
como un enjambre de meteoros
el Amor se aproxima,
- ¿a qué velocidad? -
El alma tiembla.
El planeta, el cielo, mi piel... se agitan
y convulsiona emocionada
el agua en el Espacio.
Puede que esta vez no haya que temer,
que el fenómeno no tenga
un catastrófico impacto.
Puede que todas las abejas cosmonautas
exploten antes de alcanzar
la capa más sensible,
- toda esta superficie
de la Tierra Roja. -
“Una señal del cielo” lo llaman;
llamémoslo:
“catarata interestelar”,
“panal rocoso”,
“miel dispar/ata/da”.
Al fin y al cabo,
hecha está por seres que
potencialmente
pudieran clavársenos.
Y, sin embargo… no todas.
Es una extraña maldición que nos persigue,
esta costumbre de morir
haciendo daño.
No todas pican.
Recuerdo que no todas.
Y por este motivo,
puede que
- solo por esta vez -
no tengamos nada que temer.

*10 de enero - eclipse (luna en cáncer)*


Tu voz enciende
el sol en mi cuerpo
bajo las flores
penetra líquida
como luz de luna derretida
por un amplio ventanal
a través del cual la brisa patina y,
gélida, continúa su recorrido
tus ojos son
dos eclipses penumbrales que
cuando trato de avistar han rotado 180º
y ya no alcanzo…
para quedarme en ellos se hace tarde
pero así hablamos de la Luna y sus revoluciones
del sueño interrumpido y despertarse
Te escucho
y las palabras torrenciales
me escapan como lava incontenible
que quema, pero se hace piedra
que fluye, pero ha de detenerse
que líquida, ilumina, pero arrasa
sobre lo inflamado de mi pecho
y el secreto sabor de las conexiones
- El amor, que yo sé que así se llama
esta cosa tan rara que me pasa -
sobre eso siempre callo
percibo que mi sentimiento se alza así
como se construyen las palabras en su origen
pero antes de que el ser humano
haga magia con los verbos
/y pasemos de la lava, la piedra y todo eso.../
ha pasado muchos años haciendo Amor sin decir nada
creando lava etérea con dos palos
y dentro de las grutas
a lo que voy es que
no sé si hiciera falta salir del hueco de la piedra
y que es posible que para mi amor
no haya palabras
que ni siquiera hagan falta las palabras
esto pienso, pero sé bien lo mucho que tú disfrutas
de degustar la génesis de las palabras
espero que las mías maduren sin hacer ruido
tan solo planto semillas y deseo:
nacerán
        y serán de nuestro agrado

Dane John Gardens

 

Escucho los pájaros
que repican sobre el agua
anunciando lo solemne
en esta ciudad catedralicia
Los adoquines despliegan cada mañana
su grisácea alfombra recién lavada
para recibir con castañuelas
las pisadas de caballos
La fuente realiza un solo
de arrullo y canta cristalina
El sol es un milagro que ocurre lento
besa la hiedra que trepa inmensa
por la corteza de algún que otro torso
amplio y abierto
que toma el sol
en estos jardines
Es un día primaveral de invierno
con un viento floreado aleteando por las calles
No ha pasado el tiempo aquí
solo la gente
la gente cambia

ama(zo)nia

 

Me quema el corazón
y lloro en llamas
mis brazos pretenden sofocar
el humo
que desprenden
las brasas
de mis ventrículos solares
-- cardinales --
crepitando en todas direcciones
Yo solo trato de apresar
con estas diminutas manos
verdes
la humareda
Que no se incendie todo
Que aun nos quede
intacta
una semilla
Que el pecho
vuelva a florecer
Que cante
Que ruja el animal
que lo defiende

Platanus X Hispanica

 

Poco o nada conté a nadie
de ese amor que tuve lejos
me gustaba por su piel rugosa
por su cuerpo orondo y barrigudo
por su inmenso abrazo antideslizante
Entonces supe que estaba enfermo
y que por eso era diferente
Es así, estás enfermo
y así te amo
y ya no temo contagiarme
y ya no hay culpa

el fruto

 

El fruto lila
del que no sé nada apenas
deja un olor extraño entre los dedos
siente que se precipita
la rama que lo sostenía
ha decidido liberarlo
está preparado
no se asusta
su mejor jugo será extraído
no será como una muerte ácida
sino un aterrizaje en un estado distinto
el fruto que encontramos
y que yo no había visto
nunca antes

Fújur

Hoy es el día

del amor incondicional
del perro blanco
dragón
con escamas perladas
de la suerte
volador
de la guía, la lealtad
lo prístino
hoy es mi día
un primer día de muchos
aunque no lo diga el calendario
aunque el sol venga y se vaya
como si nada
como si de un día ordinario
de invierno se tratase
hoy es un día suave
de respirar valiente
juego y descanso
esa historia interminable
de mirarse a los ojos profundo
de caricia en blancura y pelaje claro
mi día mullido
colchón flotante
en el que reposar la fuerza y
abierta
rendirme
a amar(me) vulnerable

el amor de las pequeñas cosas

una mujer feliz

está sentada en una estancia mágica
solo trata
de establecer contacto
piensa que un zorro
no es un zorro solamente
que una lluvia suave no es
únicamente agua y empaparse
cierra los ojos y
sostiene su corazón
se hace cargo de su latido
respira
le está tan agradecida…
sabe que hay cosas
que no necesita
no tiene prisa
mira, a pesar de que
aún se siente intimidada
camina, pero cautelosa
trata de no perderse muchas veces
de regresar al centro
pide pide muy bajito
permiso
ayuda
bendiciones
no se asusta por formular plegarias
se maravilla y palpita
por las palabras que llegan
en su forma y momento
abraza su incomprensión y sus errores
acaricia a su niña herida
conoce a la otra, la que se ríe,
a esa niña alegre
pero que es la misma -
desea visitarla
un ratito cada día
descubre cuánto aprende
admirando su frescura
redescubre el verdadero amor
se reconoce
en un amor sanado
se reafirma
encuentra
el verdadero
amor
de las pequeñas cosas
en todos los lugares
en los que lo había depositado
el amor de las pequeñas cosas
es el amor de los grandes mandamientos
y porque es como un milagro
ella confiesa que también, a veces, reza
a su manera