Si
se fuera
si
se fuera
la
nube negra
que
tapa
la
manta de luz
que
nos cubre
Si
fuese capaz
de
expresar
la
debilidad que me agita
el
sudor
que
emana tu cuerpo
unas
caderas exactas
que
se me escurren
entre
las piernas
Si
yo fuese capaz
de
exhalar el deleite
en
un grito
un
oh oh oh
de
placer desfogado
un
rugido
del
fondo del vientre
de
tu espalda
que
se arquea
y
se cimbre sedosa
esa
cadencia de espuma
que
abre y que cierra
los
ojos.
Ese
hueso exacto
y
bellísimo
de
tu clavícula trémula
en
mis labios
Si
yo pudiera
hablarte,
pues,
con
mi alquimia
y
mi tacto
Si
pudiera zafarme
de
aquella mordaza
que
se anuda tan fuerte
y
me ahoga,
que
se desata,
pero
se anuda de nuevo...
Si
yo, pero tú
palpitando
te acabas,
me
hundo
me
tañes
como
un bothram ritualístico.
Si
tañes tan fuerte
este
cuerpo
hasta
hacer
de
la música,
cuántica,
hasta
hacer
de
un instante en la tarde
un
meteoro fulgiendo.