domingo, 21 de junio de 2009

miedos

Muy a menudo
a oscuras
de madrugada
padezco insomnio
y quisiera llevarte
al tejado
a hablar
las horas muertas
la vista amniótica.
Pasar, de nuevo,
con la palma
de la mano
abierta, sintiendo
la textura
de mi pared...
Y quisiera
saber qué
te da miedo
y tener claro
confiar en ti.
Empezar de nuevo.
No temer más
una mano en alto
o una voz,
un improperio...
No sentir pavor
cuando pienso
en mi piel
junto a tu calor
y muchas de las
veces,
como nuestra
lámpara de noche,
apago el pensamiento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario